martes

Jefes y Jefazos: ¿Por qué son las cosas como son y no pueden ser de otra manera?

Después de varios años trabajando (no hace falta detallar el número exacto ni los lugares concretos), he llegado a la conclusión de que hay una relación súper-estrecha entre el ser jefe y la incapacidad que tienen para usar las manos.

¿Por qué cuando una persona pasa a ser jefe /a (que si no las feministas se mosquean) sufre una transformación en plan Shrek y pasan de hacer cosas habituales que habían hecho hasta ese momento a convertirse en auténticos dinosaurios?

Veamos varios tipos para que sirvan de ejemplos clarificantes:


Jefe Chanquete

Ese jefe ya caduco, que tiene más años que Marujita Díaz (pero que se conserva peor que ella) y que es como Chanquete (porque sólo podrán sacarlo de la empresa los de la Sangre de Cristo) y se empeña en que le quites una grapa de un documento, le hagas una fotocopia o le hagas una carta (con el lenguaje que utilizaba el Quijote, claro está, porque si no , está mal y además esta juventud no sabe escribir) y te lo dice él que te da unos manuscritos que no los descifras ni con la piedra roseta, con una letra barroca y enrevesada a más no poder y todo emborronado porque está escrito con plumilla (que digo yo, que antiguo por antiguo lo entendería mejor si lo esculpiese con un cincel).

Conclusión: Con este no tienes nada que hacer y mejor que lo des todo por perdido porque le gusta que le sirvan y está incapacitado para lo que le queda de vida laboral para usar las manos.

Jefe Colega de la Vega

Es el típico jefe (suele ser jovencillo), accesible, y aparentemente moderno, PERO NO TE DEJES ENGAÑAR, suelen ser más torpes que Espinete y además lo potencian para escaquearse hasta el infinito.

Tienen varios clásicos: te descogotan archivos compartidos (y ellos nunca han tocado nada), envían imprimir un documento de mil hojas en blanco, atascan la impresora y la dejan tal cual, se les acaba el toner de la fotocopiadora pero no lo cambian porque:”Ay, ¿te importaría cambiarlo tú? Es que a mí estas cosas se me dan fatal” si, si, ya lo sabemos, si tu madre te tenía que haber puesto un pararrayos a modo de diadema en la cabeza, porque allí donde vas, la lías bien líada, anda hijo, abrázate a un árbol y tarda un ratico en volver.

Conclusión: Con este no tienes nada que hacer y mejor que lo des todo por perdido porque es un jeta y está incapacitado para lo que le queda de vida laboral para usar las manos, eso si, la BlackBerry la usa que da gusto verlo.